Las altas temperaturas, mantenidas de forma sostenida durante un tiempo, pueden tener efectos sobre la medicación, especialmente en el caso de medicamentos destinados al tratamiento de enfermedades crónicas. Teniendo en cuenta que acabamos de pasar la primera ola de calor del verano, habiendo llegado incluso Albacete a estar en alerta roja por superar los termómetros los 40 grados y cuando se avecina la que podría ser la segunda ola de calor del verano a partir del lunes, donde la previsión de la Aemet indica que las máximas sobrepasarán los 41 y 42 grados y las mínimas no bajarán de los 21 grados, desde el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Albacete hacen un llamamiento a la población para alertarla de que determinados medicamentos pueden agravar los efectos de la ola de calor por su mecanismo de acción, y otros pueden provocar fotosensibilización como efecto adverso.
Por ello, se aconseja a los pacientes en tratamiento farmacológico que tengan dudas sobre la conservación de sus medicamentos que consulten a su farmacéutico para comprobar si requieren un cuidado especial, dado que algunos medicamentos deben mantenerse en el frigorífico, y en otros casos, es bueno que no superen los 25 grados de manera sostenida.
Existen cerca de 680 principios activos, unas 7.000 presentaciones autorizadas y dispensables en farmacia comunitaria, que requieren de un uso precautorio durante episodios de ola de calor. La edad, el estado fisiológico, la existencia de patologías de base, la actividad física, entre otros, son factores a tener en cuenta y que también influyen en este sentido.
Formas farmacéuticas específicas como supositorios, óvulos, cremas, son bastante sensibles a elevaciones de temperatura. En este caso, «es relativamente fácil juzgar el mantenimiento de la calidad después de la exposición al calor porque el aspecto del producto al abrirlo indicará la estabilidad de estos medicamentos», señalan desde el órgano colegial.
Los pacientes no deben de tomar ningún medicamento sin la prescripción del médico o sin el consejo del farmacéutico en el caso de fármacos que no precisan receta. Siempre debe ser el médico el que evalúe la interrupción del tratamiento.
Unido a ello, los farmacéuticos insisten en que determinados medicamentos, como los antiinflamatorios, antidiabéticos, antidepresivos, corticoides, diuréticos y anticonceptivos, entre otros muchos, son fotosensibilizantes , con lo cual si estamos tomando alguno de ellos y al mismo tiempo nos exponemos al sol, se pueden producir reacciones e intolerancias no deseadas, de ahí que se insista en la importancia de la fotoprotección.
Consejos de los farmacéuticos:
1.- Conserva tus medicamentos en un lugar fresco y seco. La mayoría de los medicamentos se deben conservar a temperaturas inferiores a los 25-30 grados centígrados.
2.- Si no hay mención específica a la temperatura de conservación, existen estudios que demuestran que esos medicamentos no se degradan cuando son expuestos a temperaturas superiores a 40 grados durante seis meses.
3.- Utiliza, tan pronto como los saques del frigorífico, los medicamentos que necesitan conservarse entre 2-8ºC.
4.- Si necesitas transportar medicamentos que sean sensibles al calor, utiliza una nevera portátil si es necesario.
5.- Supositorios, óvulos y cremas son más sensibles al calor.
6.- No dejes tus medicamentos durante mucho tiempo ni en la guantera ni en el maletero del coche.